El Valencia florece contra la voluntad de quienes habran de cultivar este equipo surgido por generacin espontnea y descarado en la pelea por Europa. Cuando ms lo podan, ms se fortalece, una realidad que tiene a Mestalla engrescada contra Peter Lim, que ms que ilusionarse y apoyar ha optado por echar cuentas y recostarse en los 35 puntos que ve en tabla. Alejado del descenso, mira ms el balance que una clasificacin que engorda la trabajada victoria ante el Almera.[Narracin y estadsticas: 2-1]
La vida en medio del huracn constante no es fcil. Ha conseguido Rubn Baraja, la horma perfecta para el banquillo, que el vestuario se asle del abandono institucional, se apriete las botas y busque rebelarse con hambre y calidad. Ante rivales gigantescos no le alcanza, pero se arraiga con fuerza ante el resto si le concede la mnima oportunidad. Eso hizo el Almera y lo pag caro.
Con descaro juvenil, los valencianistas hace tiempo que entendieron el mensaje del tcnico vallisoletano: su futuro est slo en sus botas. Han perdido al capitn Paulista y no tendrn la ayuda de Rafa Mir, condenado a quedarse en Sevilla por los errores de unos y otros que ahora se lanzan culpas. En un anlisis simplista hara quien hoy no entendera por qu el Valencia necesitaba al grandn delantero murciano si tiene a Hugo Duro, reencontrado con las mieles del goleador.
De la sequa de una temporada gris a la decena de goles que le coloca en el escaparate de la Seleccin Espaola. Esa confianza le hizo enganchar el centro que, despus de una endiablada carrera, le puso Diego Lpez para que abriera el marcador. Antes Gonzalo Melero haba enviado a la grada el mejor baln de oxgeno que podan encontrar los andaluces. Baptistao haba roto a Cenk y servido al segundo palo una pelota tan perfecta como mal rematada. Nada le sale a este equipo que cada partido acaba ms hundido en la tabla.
El agujero que se trag al Almera se hizo ms grande en el minuto 23, cuando Pepelu telegrafi un centro desde el pico del rea a la cabeza de Yaremchuk para que el ucraniano marcada el segundo gol. Entonces en Singapur, a las diez de la noche, alguien puso pensar para qu el empeo en un delantero si hay dos goleadores. Un anlisis demasiado simplista que no acall los gritos unnimes en la grada de ‘Peter, vete ya’.
Con una ventaja engordada antes de la media hora pareca que el Valencia tendra un partido plcido ante el colista. No fue as. Este Almera se revuelve con ftbol pero se encuentra con todo lo dems en contra. Marc Edgar ayudado con un mano que vio el VAR y se salv Mamardashvili de que le recordaran que es tan felino bajo palos como temeroso en sus salidas.
El brote verde para buscar la primera victoria lo encontraron los andaluces tras el descanso. Centelles vio el agujero que dej un dolorido Gay en el segundo palo y ni Cenk ni Guerra frenaron el mpetu de Sergio Arribas, que lanz a cabecear el baln al fondo de la portera. Se apretaba un partido que no daba sensacin de estar cerrado.
Otra vez le tocaba al Valencia maximizar los escasos recursos en medio de en un huracn permanente que recuerda que todo puede volar por los aires en un abrir y cerrar de ojos. Eso fue lo que intent Ramazani con un remate a puerta vaca que salv Mosquera. Pensaba el Almera que iba a tener su oportunidad, hasta que volvi a aparecer el VAR cazando un manotazo de Centelles a Diego Lpez en la cara, que oblig al asturiano a salir del campo camino del hospital con un pmulo hundido. El penalti poda darle aire al Valencia, pero Maximiano apareci para acabar con la racha de Pepelu, que slo haba fallado uno en toda su carrera, en 2022 con el Tondela portugus.
En esa jugada languideci el partido media hora antes de que Muiz Ruiz pitara el final. Imprecisiones, pocas ocasiones y otra posible mano en el rea del Almera que, esta vez, no se pit. Baraja, que se quedara con un puado de jugadores del colista, reclam el favor Mestalla brazos en alto y a sus exprimidos jugadores la frialdad para amarrar la victoria. Cada uno acus su realidad. El Almera lamentndose. Qu ms tiene que hacer para salir del pozo. El Valencia, rogando por que le aguanten las fuerzas para resistir en la pelea por Europa.