Un cubano sin identificar llegó herido -por un intento de asalto- al policlínico de Calabazar, en La Habana, y los médicos le indicaron que no había suturas ni anestesia para atenderlo, reportó el medio CubaNet.
Los profesionales de la salud le dijeron que solo podían tomarle la presión arterial, ante la falta de insumos en ese centro médico.
El paciente debió irse del policlínico con la herida abierta en su rostro.
Antes esta situación, una de las personas que acompañaba al herido expresó: “si aquí las cosas se pagaran, hubiera de todo. Que cierren entonces”.
La crisis de la Salud Pública en la isla tiene varios años, agudizada tras la pandemia de COVID-19.
Precisamente este mes de marzo, el presidente designado del régimen cubano, Miguel Díaz-Canel, admitió en reunión con funcionarios del Ministerio de Salud (Minsap) que persistirá en la isla la escasez de medicamentos e insumos.
Díaz-Canel también lamentó que existan en el sector de la salud algunas “tendencias negativas” como la venta de servicios o el tráfico de medicamentos en el mercado negro.