El Campeonato de Lucha Extrema (UFC, por su sigla en inglés) despidió en las últimas horas al luchador cubano de 35 años Robelis “Big Boy” Despaigne, según varios medios deportivos.
Pero, a pesar del reciente despido, el extaekwondoca ya tendría ofertas de otras empresas ligadas al arte marcial mixto.
“Despaigne podría hallar nuevo empleo en otras entidades de MMA como Professional Fighters League o Bellator, y alguna de reglas híbridas del caso de Gamebred Fighting Championship, que preside Jorge Masvidal”, señaló el reportero Jorge Ebro en el Nuevo Herald.
Además, podría insertarse en el boxeo a mano limpia de Bare Knuckle Fighting Championship (BKFC) y Karate Kombat, de creciente relevancia en el país.
“No son pocos los casos de artistas marciales que vieron cómo expiraba su tiempo en UFC o Bellator, pero continuaron carrera y tuvieron éxito en otros circuitos’’, señaló un especialista en el mismo medio.
El Luchador Cubano Robelis Despaigne fue despedido de UFC después de sus 2 derrotas consecutivas 😔🇨🇺 pic.twitter.com/l4glfnA14x
— Gaston “Tonga” Reyno (@gastonreyno) October 29, 2024
El extaekwondoca cubano, bronce en los Olímpicos de Londres 2012, noqueó al norteamericano Josh Parisian en apenas 18 segundos en su debut como luchador, en marzo pasado.
Con esta victoria el cubano, radicado en Florida desde hace dos años, acumuló balance perfecto de 5-0 en la especialidad de las artes marciales mixtas. Todos esos triunfos fueron por la “vía rápida” del nocao.
Tales resultados apuntaban entonces a que el cubano se convertiría en la “nueva estrella” de la UFC, pero, finalmente, no pudo adaptarse a ese sistema.
En mayo perdió su invicto ante el empuje de un contendiente de alto nivel como el dominicano Waldo “Salsa Boy” Cortés Acosta por decisión unánime de los jueces.
Despaigne estuvo en el equipo cubano de Taekwondo por más de dos décadas y allí conquistó medallas olímpicas y mundiales. También brilló a nivel centroamericano y panamericano.
Ya en Estados Unidos incursionó en este tipo de arte marcial mixto y poco a poco demostró que tenía madera para propósitos más altos. Ahora tendrá que reinventarse.