Rick Scott, según admite que no es un candidato llamativo. Sus aliados reconocen que no es un gran orador ni el tipo de político capaz de llenar un estadio con seguidores leales, como lo hizo Donald Trump.
Rick Scott, según admite que no es un candidato llamativo. Sus aliados reconocen que no es un gran orador ni el tipo de político capaz de llenar un estadio con seguidores leales, como lo hizo Donald Trump.