Niegan por cuarta vez el cambio de régimen carcelario a la dama de blanco Sissi Abascal



Por cuarta ocasión, las autoridades de la cárcel de mujeres La Bellotex, en la provincia de Matanzas, pospusieron por otros seis meses los beneficios a la presa política Sissi Abascal, un derecho que le corresponde según las regulaciones penitenciarias cubanas.

“El lunes 16 de septiembre, en horas tempranas de la mañana, la directora del penal Martha Cristina Hernández Bacallao condujo a Sissi Abascal a la dirección del penal y allí le comunicó que no tendría beneficio alguno por otros seis meses porque ella continúa siendo una presa negativa”, dijo a Martí Noticias, Annia Zamora, la madre de la activista encarcelada.

“Sissi Abascal no participa en las actividades del penal. Ella es una presa política, una dama de blanco y mantiene su postura allí. Entonces no tendrá beneficios, no podrá salir de régimen severo, continuará con uniforme, tras las rejas con candado”, lamentó.

Abogados independientes han explicado a nuestra redacción que las personas sancionadas a privación de libertad dependen de la opinión de los funcionarios del Ministerio del Interior (MININT) que determinan el tránsito a régimen de menor severidad, los tipos de castigos y sobre cualquier tipo de excarcelación anticipada que prevea la legislación penal.

Abascal Zamora, con 27 años recién cumplidos, fue sentenciada a seis años de cárcel por los supuestos delitos de “desacato”, “atentado” y “desorden público”, tras manifestarse pacíficamente en la localidad de Carlos Rojas, en Matanzas, durante las protestas populares que tuvieron lugar en Cuba el 11 de julio de 2021.

“La mayoría de nuestros presos políticos del 11J se encuentran en régimen severo, sin ningún tipo de beneficio. Además, están en unas condiciones críticas, el hambre es grande en las prisiones, no tienen medicamentos, son atormentados psicológicamente”, indicó Zamora.

Las terribles condiciones de higiene, salubridad, alimentación y atención médica de los establecimientos penitenciarios de la isla, que impactan a todos los reos, se hacen más condenables en el caso de los recluidos por motivos políticos.

“Nuestros presos políticos son inocentes. No cometieron ningún delito, salieron el 11 de julio a manifestarse pacíficamente por un cambio y a pedir libertad”, dijo.

El centro de asesoramiento legal Cubalex ha alertado que la negación sistemática de beneficios penitenciarios constituye una forma de castigo contra las personas privadas de libertad por motivos políticos en la isla.

Aunque Cuba ha ratificado su compromiso con las reglas Nelson Mandela, normas mínimas de Naciones Unidas para el tratamiento de reclusos, la crisis económica del país y la indolencia de las autoridades estatales, hacen que los penados reciban doble castigo.



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