Tras el colapso del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) la organización independiente Justicia 11J registró casi 50 protestas y al menos cinco detenidos.
“Actualizamos a 48 el número de protestas relacionadas con este escenario que hemos podido verificar”, señaló a Martí Noticias Raúl Medina Orama, responsable de Comunicación de la ONG Justicia 11J.
Medina precisó que hasta ahora han registrado las detenciones de Raymond Márquez, Narbiel Torres y Osvaldo Agüero (Manicaragua, Villa Clara); y de Luis Adrián Pupo (Songo La Maya, Santiago de Cuba).
“Desconocemos la situación actual de Javier Zaldívar (Nuevitas, Camagüey), que también fue arrestado”, precisó la ONG en un comunicado.
La mayoría de las protestas documentadas (34) entre el 18 y el 24 de octubre de 2024 fueron cacerolazos. También se registraron carteles, cierres de calles, caminatas y manifestaciones ante instituciones estatales, entre otras acciones.
Las protestas ocurrieron en La Habana, Artemisa, Camagüey, Granma, Holguín, Mayabeque, Sancti Spíritus, Santiago de Cuba y Villa Clara.
“Estamos buscando y verificando información sobre arrestos reportados en varios sitios de La Habana. También conocimos de un grupo de detenidos que ya estaría recluido en el Combinado del Este”, precisó Justicia 11J.
La ONG pidió a los familiares de los arrestados y a la ciudadanía en general “colaboración para registrar todas las detenciones y conocer el estado y las identidades de los manifestantes. Garantizamos la protección de las fuentes que no deseen ser identificadas”, dijeron.
En medio del apagón total, el gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel, amenazó a los ciudadanos que protestaran por el colapso energético. En el video de una reunión difundido por la oficina de la Presidencia, Díaz-Canel aseguró que su gobierno no iba a aceptar ni permitir que “nadie actúe provocando hechos vandálicos y mucho menos alterando la tranquilidad ciudadana de nuestro pueblo”.
Tras el colapso del SEN el gobernante Miguel Díaz-Canel aseguró en televisión nacional que su Gobierno actuaría con “rigor” contra quienes trataran de alterar el orden público.