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Uno de los pocos bancos que facilitaba a los venezolanos mover dinero en el extranjero después de las sanciones de Estados Unidos está en el centro de una controversia, luego de que cerró sus puertas dejando a cientos de clientes en Miami, Puerto Rico y varios países de habla hispana sin poder retirar sus fondos desde hace más de un año.
Se estima que unos $80 millones están atrapados dentro del Nodus International Bank, con sede en Puerto Rico, situación que ha desencadenado una serie de demandas, al menos una de ellas en Miami, en medio de acusaciones de que altos ejecutivos y accionistas han desviado fondos del banco para enriquecerse en lugar de devolver el dinero a sus clientes.
“No hay suficientes palabras para lo que siento”, dijo Adelaida Cedeño, una empresaria venezolana de 63 años reside en España que tiene alrededor de $35,000 en el banco. “Nos siguieron alimentando mentiras desde el principio, y ahora no hay una persona que levante el teléfono o responda a un correo electrónico. Me siento víctima de un fraude”.
Cedeño, quien confió en el banco para realizar transacciones para su firma de comercio internacional, dijo que está a punto de perder su negocio y que tiene todos sus activos acumulados debido al cierre del banco.
Al igual que Cedeño, hay cientos de ciudadanos venezolanos, algunos de ellos viviendo en el sur de Florida y otros en el extranjero, que todavía esperan tener acceso a sus fondos después de que el banco cesó sus operaciones poco meses después de recibir un fallo en octubre de 2022 del Departamento del Tesoro de Estados Unidos notificando que había violado las sanciones venezolanas.
Las cuentas de Nodus no están aseguradas por la Corporación Federal de Seguro de Depósitos, porque está registrado como banco internacional en Puerto Rico, condición lo que lo excluye de la cobertura con que cuentan los bancos de Estados Unidos.
Fundado en 2009, el banco había sido dirigido principalmente por venezolanos que atendían a clientes venezolanos, aunque alrededor del 20% de su clientela provenía de otros países.
El banco también había tratado de expandir sus operaciones al sur de la Florida y en 2010 estableció una compañía financiera, Nodus Finance LLC, que otorgaba préstamos para pequeñas empresas desde una oficina en Brickell Avenue.
Al verse incapaz de operar después de entrar en conflicto con el Departamento del Tesoro a fines de 2022, el banco entró poco después en un plan de liquidación bajo la supervisión de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras de Puerto Rico, acordando cesar sus operaciones y operar su licencia con el único propósito de liquidar sus activos y devolver el dinero de los depositantes.
Pero en marzo de 2023, los reguladores de Puerto Rico notaron algunos tratos extraños. El banco había realizado pagos a sus propios directores y accionistas “incompatibles con el plan de liquidación” y había realizado transacciones con personas vinculadas al banco “que representan un conflicto de intereses que coloca a Nodus en una posición peligrosa”, dijeron los reguladores.
La oficina del comisionado puertorriqueño también dijo que había “tomado conocimiento de que al menos uno de los accionistas ha estado recaudando indirectamente regalías y/o dividendos” para supuestamente completar la liquidación, y que “dicha compensación no está incluida en el presupuesto del plan de liquidación”.
En un correo electrónico enviado al Herald, funcionarios puertorriqueños dijeron que a la luz de las irregularidades, los accionistas del banco han perdido su derecho a participar activamente en la liquidación del Nodus International Bank.
Los reguladores dijeron que están considerando “todos los remedios y sanciones disponibles por ley para garantizar que las acciones tomadas sean equitativas con los daños sufridos por los depositantes como resultado del desvío de fondos”.
Los funcionarios del Nodus se negaron a responder las preguntas del Miami Herald.
La mayoría de las personas afectadas eran depositantes de países latinoamericanos que creían que su dinero estaría más seguro en un banco internacional que en una institución local. La mayoría de ellos habían depositado fondos que iban desde unos pocos miles de dólares hasta decenas de miles.
Los clientes venezolanos favorecieron al banco con sede en Puerto Rico después que las sanciones de Estados Unidos contra el régimen de Nicolás Maduro les dejaran con pocas opciones luego que éstas comenzaran a asustar a bancos internacionales del dinero proveniente de Venezuela.
Carlos Calderón, abogado que representa a varios clientes venezolanos del banco, dijo que el proceso de liquidación de Nodus no es lo que normalmente ocurre en casos similares, porque el plan buscaba proteger primero a los accionistas del banco y no al público. “Los perdedores fueron los titulares de las cuentas”, dijo Calderón.
Si bien el plan inicial presentado por el banco ofrecía a los cuentahabientes la posibilidad de recuperar el 90% de sus depósitos, los clientes ahora esperan recibir mucho menos ante la reciente advertencia de los reguladores puertorriqueños sobre los problemas de liquidez del banco.
Roberto Hung, otro abogado venezolano que representa a los titulares de cuentas, dijo que la información que se filtró de una reunión reciente celebrada en Puerto Rico entre las autoridades y el banco sugiere que los titulares de cuentas probablemente se quedarán con incluso menos dinero del que se les dijo originalmente.
“La información que surgió de la reunión sugiere que están a punto de anunciar un nuevo plan de liquidación que ofrecerá a los depositantes con menos de $20,000 sus fondos con un descuento del 30%”, dijo Hung desde Caracas. Esto significa que los depositantes recuperarían el 70% de su dinero.
La información que surgió de esas reuniones también sugiere que los depositantes con montos más altos solo recibirían del banco pagarés que vencerían después de dos años. Si no se pagan, los depositantes obtendrían las acciones del banco en poder de los dos principales accionistas del banco.
El abogado dijo que si eso sucediera, los clientes del banco a quienes se les deben más de $20,000 dólares sólo podrían recuperar alrededor del 45% de sus depósitos.
Los clientes que emprenden acciones legales contra Nodus dicen que tienen problemas para confiar en la voluntad del banco de pagar sus depósitos dado al trato que recibieron en los meses previos al cierre de la entidad.
En una demanda presentada el año pasado en un tribunal federal del sur de Florida, ejecutivos de la empresa argentina B&G dijeron que abrieron una cuenta en Nodus en diciembre de 2022 por recomendación de un asesor de confianza sin estar al tanto de los problemas de liquidez del banco.
Aproximadamente cinco meses antes de que el banco dejara de operar, el B&G utilizó Nodus para realizar una transferencia bancaria de $214,000 que el destinatario debía recibir el mismo día, pero el dinero nunca llegó ni fue devuelto.
El banco se negó a “proporcionar respuestas significativas a docenas de consultas de B&G sobre por qué Nodus Bank no cumpliría con sus instrucciones de pago”, dice la demanda.
“Este comportamiento escandaloso y poco profesional dejó a los directores de B&G sin otra opción que contratar un abogado y reservar un vuelo a Miami para enfrentarse a Nodus Bank en su oficina administrativa. El 17 de abril de 2023, los directores de B&G entraron en la oficina administrativa de Nodus Bank y exigieron respuestas sobre la negativa a devolver el dinero de B&G”, dice.
Después de ser amenazados con acciones legales, los ejecutivos del banco acordaron devolver los fondos, pero sólo devolvieron 150.000 dólares del monto inicial, lo que dio lugar a la demanda.
“Mi cliente exige que se le paguen los $75,000 restantes”, dijo el abogado de B&G, Alejandro García, y añadió que “hay gente por ahí que está intentando cobrar cifras mucho más altas”.
Esta historia fue publicada originalmente el 27 de marzo de 2024 11:18 am.
Galardonado periodista con más de 30 años de experiencia, especializado en la cobertura de temas sobre Venezuela. Amante de la historia y la literatura.