El Oropouche y el dengue siguen en alza en Cuba “con una tasa de incidencia que ha ascendido semana tras semana”, reconocen las autoridades sin ofrecer cifras actualizadas sobre la presencia de ambos virus en el pa\u00eds.<\/p>\n
El Ministerio de Salud P\u00fablica (Minsap) dijo la semana pasada que, desde mayo, se contabilizaban 12 mil casos sospechosos de Oropouche. Un art\u00edculo del diario estatal Granma<\/a> este martes mantiene la misma cifra mientras que sobre el dengue no revelan n\u00fameros.<\/p>\n Seg\u00fan el doctor Francisco Dur\u00e1n Garc\u00eda, director nacional de Epidemiolog\u00eda del Minsap, el dengue tiene una mayor tasa de incidencia en las provincias de Pinar del R\u00edo, Mayabeque, Cienfuegos y Villa Clara y aclar\u00f3 que en los \u00faltimos d\u00edas han ingresado pacientes que evolucionaron a las formas graves de la enfermedad.<\/p>\n En cuanto al Oropouche, el funcionario aclar\u00f3 que existe presencia de casos sospechosos en las 15 provincias. Sobre el zika, el chikungunya y la fiebre mayaro, que afecta a la regi\u00f3n de las Am\u00e9ricas, asegur\u00f3 que “ninguna de estas arbovirosis tiene presencia en el pa\u00eds actualmente”.<\/p>\n Expertos consultados por Mart\u00ed Noticias consideran que las cifras podr\u00edan ser mucho mayores a las que revela el Gobierno, entre otras razones por la falta de insumos para realizar los ex\u00e1menes que detectan el virus.<\/p>\n “No sabemos los recursos que tiene o no tiene Cuba<\/a> para poder hacer el an\u00e1lisis en todas las personas que tienen s\u00edntomas. Tampoco sabemos si quieren decir la verdad. Hay muchas razones por la que los n\u00fameros pueden ser diferentes a los que ellos dan”, apunt\u00f3 a Mart\u00ed Noticias la doctora Dadilia Garc\u00e9s, especialista en Epidemiolog\u00eda y profesora de Miami Dade-College.<\/p>\n Eduardo L\u00f3pez-Collazo, director del Instituto IdiPAZ de Investigaciones Biom\u00e9dicas de Madrid, en Espa\u00f1a, se\u00f1al\u00f3 por su parte que “la crisis econ\u00f3mica y sanitaria en Cuba, agravada por la falta de recursos m\u00e9dicos, medicamentos y una probable mala gesti\u00f3n, ha deteriorado la infraestructura hospitalaria, convirtiendo al pa\u00eds en un terreno propicio para la propagaci\u00f3n de enfermedades infecciosas\u201d.<\/p>\n