El Consejo de Defensa del régimen cubano decidió extender hasta el próximo domingo 27 de octubre las medidas adoptadas por el Gobierno que fueron informadas el pasado 20 de octubre de 2024.
Según el reporte oficial, el país se mantendrá prácticamente paralizado, sin actividades docentes y laborales, a no ser aquellas imprescindibles, como en hospitales, funerarias, etc.
Desde la oficialidad precisan que estas disposiciones están orientadas a poder continuar las labores de recuperación tras los daños ocasionados por el huracán Oscar en la región oriental del país, así como el restablecimiento del Sistema Electroenergético Nacional (SEN).
Ratifican que las medidas afectan tanto las actividades laborales como las docentes.
Igualmente, ratificaron que los trabajadores movilizados debido a estas circunstancias recibirán el pago de su salario promedio.
Además, aquellos que no pueden asistir al trabajo debido a la suspensión de actividades recibirían una garantía salarial equivalente al salario escala del cargo que ocupan, dijeron.
Hasta el momento, informes oficiales confirman el fallecimiento de siete personas a causa del paso del huracán Oscar. Seis de las víctimas pertenecen al municipio de San Antonio del Sur y una a Imías, en la provincia de Guantánamo.
Reportes preliminares indican que unas 6,000 personas se han visto afectadas, y alrededor de 4,000 núcleos familiares resultaron damnificados, principalmente debido a inundaciones causadas por el desbordamiento de ríos y la penetración del mar en zonas costeras bajas. Más de 1,800 viviendas sufrieron daños como consecuencia de estas condiciones.
El huracán Oscar ingresó a Cuba como categoría 1 el pasado domingo por la tarde, cerca de Baracoa, Guantánamo, y permaneció en territorio cubano por más de 24 horas, provocando intensas lluvias que en algunas áreas llegaron a los 630 milímetros.
En cuanto al colapso energético que sufrió el país el viernes pasado y queduró más de cuatro días, aunque en la actualidad se estabilizó el SEN, el déficit energético continúa y en muchas provincias apenas ponen la corriente cuatro horas al día.