Una operación encubierta para desmantelar una red de tráfico de personas en el condado de Polk, en el centro de Florida, llevó al récord de arresto de 219 sospechosos la última semana.
El sheriff del condado de Polk, Grady Judd, informó en conferencia de prensa que durante el operativo de siete días, que comenzó el pasado 19 de septiembre, la Unidad Antivicio de la Policía y fuerzas del orden asociadas detuvieron, entre otros, a “sospechosos que solicitaban prostitutas, a personas que se ofrecían a ejercer la prostitución y a otros que se beneficiaban o ayudaban e incitaban a la prostitución”.
Durante la investigación, se identificaron a 21 posibles víctimas de trata entre las 119 prostitutas. Hubo 83 sospechosos arrestados por solicitar una prostituta y viajar al lugar encubierto para negociar tener relaciones sexuales a cambio de dinero; de otros 17 sospechosos detenidos, cinco obtenían ganancias de la prostitución o era cómplices de prostitutas y ocho llevaban a las prostitutas al sitio encubierto.
La Operación Traffic Stop 2 permitió también el arresto de 35 personas que se encuentran ilegalmente en el país, tres de las cuales fueron identificadas como víctimas de trata de personas. Los indocumentados proceden de Cuba, Chile, Venezuela, México, Guatemala, Colombia y Bahamas.
“Es alarmante ver más indocumentados en cada operativo. Debería ser una gran advertencia para Estados Unidos”, señaló Judd.
Hasta el momento, dos sospechosos fueron acusados de trata de personas, un delito grave a perpetuidad: Freddy Escalona, de 30 años, y María Guzmán, de 36.
Escalona, de Chicago, Illinois, fue acusado de trata de seres humanos y obtención de ingresos de la prostitución. El imputado obligó a prostituirse a una víctima para que le devolviera el dinero que le prestó para arreglar su carro. Le quitaba hasta 70% de sus ganancias.
Según dijo a los detectives, tenía “varias mujeres con las que trabajaba” que le pagaban por transportarlas y “mantenerlas a salvo”. La investigación está en curso, y otros cargos están pendientes.
Guzmán, de Orlando, fue acusada también de trata de personas y obtención de ganancias. La mujer traficó con dos víctimas desde un hotel en esa ciudad; ella organizaba sus “citas” y se beneficiaba del dinero que ganaban.
Los detectives imputaron un total de 44 delitos graves y 242 delitos menores durante la investigación.
De las personas detenidas durante el operativo, 42 estaban en posesión de drogas ilegales; los detectives incautaron fentanilo, heroína, cocaína, crack, metanfetamina y marihuana. Asimismo, dos portaban armas de fuego.
Además de los sospechosos que residen en Florida, fueron arrestados 18 que proceden de los estados de Alabama, California, Georgia, Illinois, Massachusetts, Maryland, Michigan, Pensilvania, Tennessee y Wisconsin.