LA HABANA, Cuba.- En el año 1846 un médico norteamericano llamado Thomas Norton aplicó a un paciente la primera anestesia documentada, modificando para siempre, y para bien, el traumático proceso de la cirugía. Dos años antes Horace Wells, dentista de Connecticut, había administrado óxido nitroso para extraer piezas dentales.
Se dice que antes del descubrimiento de la anestesia, el éxito de las operaciones dependía de la capacidad del cirujano para soportar gritos de dolor, y de su conocimiento de plantas o fármacos con propiedades analgésicas para aliviar, en alguna medida, el suplicio.
La primera anestesia local con éter sulfúrico fue aplicada por primera vez en La Habana, y toda América Latina, en marzo de 1846 por el clínico Vicente Antonio de Castro y Bermúdez. Cuatro meses más tarde, en Santiago de Cuba, el Dr. José Fernández Celis, cirujano venezolano radicado en la oriental ciudad, empleó éter mediante un equipo diseñado por el químico estadounidense Charles Jackson para amputar dos artejos del pie derecho. No se reportaron complicaciones, de modo que la cirugía fue todo un éxito.
Aunque la práctica de la anestesia en la Isla corrió por cuenta de odontólogos y cirujanos, eventualmente las enfermeras y estudiantes también fueron capaces de administrarla. La complejidad del proceso, así como las variantes que iban surgiendo para perfeccionarlo, motivó que jóvenes galenos eligieran dedicarse exclusivamente a ese campo del saber dentro de la medicina, lo que hizo posible que para la década de 1920 se hablara de la Anestesiología como una especialidad.
Paulatinamente fueron surgiendo anestesistas de renombre, como Luis Raúl Hevia y Jaime de la Guardia, quienes presentaron dos importantes ponencias en el Séptimo Congreso Médico Nacional, celebrado en 1927. Hevia dio a conocer sus progresos en la aplicación del Ethyleno como anestésico, y de la Guardia hizo pública su contribución al estudio de la anestesia intra-raquídea.
El trabajo mancomunado y sostenido de varios galenos hizo posible el surgimiento de la Sociedad Nacional de Anestesiología, en septiembre de 1950.