Calvio dice que el 70% del trabajo est hecho y confa en presentar una propuesta para el acuerdo en octubre
Ni discusin sobre los candidatos a presidir el Banco Europeo de Inversiones ni propuesta formal para un acuerdo sobre la reforma de las reglas fiscales. Los ministros de Economa y Finanzas de la UE se han visto las caras esta semana en Santiago de Compostela, y aunque a principios de verano las expectativas eran muy altas y se confiaba en poder encarrilar dos de las cuestiones ms relevantes en esta cita, las diferencias o las dudas son todava demasiado grandes. Sigue habiendo cinco nombres en la mesa para el puesto al que aspira Nadia Calvio y cada da que pasa se hace ms difcil que pueda haber un nuevo marco fiscal antes de que se saque del coma inducido en el que est desde el inicio de la pandemia al Pacto de Estabilidad. Ambos procesos tienen la misma fecha lmite, el 1 de enero de 2024. Y ahora, irnicamente, ambos pueden quedar vinculados de una forma indeseada.
El sentir general entre las delegaciones de los 27 estados miembro y las instituciones europeas es que no hay tiempo material para concluir el debate a tiempo durante la presidencia espaola. En el calendario ms optimista, que es de por s muy ambicioso, nuestro pas, que tiene la presidencia temporal del Consejo de la UE, pondra sobre la mesa una propuesta de acuerdo en el prximo Ecofin, a mediados de octubre en Luxemburgo. De ah, en apenas cuatro semanas, habra un acuerdo y se aprovechara el Ecofin de noviembre para dar la rbrica. Justo a tiempo para empezar la negociacin con la Eurocmara en los llamados ‘trlogos’, buscando el milagro de concluir todo antes del final de diciembre.
“Es imposible. No es un drama, no es un fracaso, pero es imposible a estas alturas“, resume un diplomtico europeo. “Si logran presentar la propuesta y se allana el debate para que logremos un acuerdo a principios de ao y se zanje todo antes de las Elecciones Europeas me doy por satisfecho”, dice un segundo participante en el encuentro. El vicepresidente Valdis Dombrovskis en la rueda de prensa final tambin mencion ese plazo como el objetivo ltimo para que el nuevo marco est en marcha y sirva para las orientaciones fiscales y las recomendaciones de cada pas en 2025.
Pero pese a todo, Espaa mantiene pblicamente la fe. “Ya hemos acordado el 70% del texto y a los ministros vamos a plantearles pasar a la negociacin poltica del 30% restante. Con un adecuado equilibrio entre una reduccin sostenida de las ratios de deuda pblica sobre el PIB […] acomodando la necesaria inversin y los incentivos para abordar las reformas estructurales”. Con estas palabras resumi este sbado la vicepresidenta primera del Gobierno en funciones, Nadia Calvio, el estado de la cuestin sobre la reforma de las reglas fiscales, uno de los debates ms importantes para el futuro de la Eurozona y el dosier ms relevante quizs de lo que queda de presidencia espaola. Tenemos un calendario ambicioso para que las nuevas reglas se apliquen a partir de 2024. Ha sido una jornada que solo cabe valorar como extraordinariamente positiva”, resumi la espaola.
EL BEI
Calvio quera dejar resuelto su futuro personan en Santiago de Compostela. Para evitar sustos, para que no quede todo involucrado con los intentos de investidura. Pero tambin para evitar que los dosieres del Banco Europeo de Inversiones y de las reglas fiscales acaban salpicndose. Varias delegaciones explican que dejar la puerta abierta hace posible que veamos complicaciones adicionales. “Si hubiera salido un candidato de esta reunin no habra problemas. Pero ahora cada capital puede ir a Calvio con la lista de la compra”, explican fuentes europeas a este diario.
Un buen ejemplo es el de Italia, que ha presentado para dirigir al BEI al ex ministro de Draghi Daniele Franco. En verano, cuando la espaola dio un paso al frente, asumieron que Franco no tena nada que hacer, y una parte del Gobierno sugiri su nombre para ocupar una silla que quedar vacante en breve en el Consejo del BCE. Esa idea se descart, en favor de un tcnico que ha sido finalmente aprobado, as que Franco volvi a la carrera del BEI. No tanto porque tenga oportunidades sino como tctica negociadora. A cambio del apoyo italiano vienen las peticiones, tambin en lo que respecta al futuro de las reglas fiscales. Y lo mismo vale para todos, especialmente Alemania. La vicepresidenta espaola necesita a Berln. Cuenta con la simpata del canciller socialista Scholz, pero no del ministro de Finanzas liberal Lindner. Que ahora puede apretar doblemente con sus exigencias de objetivos nmeros de ajuste anual para los pases con cuentas pblicas ms deterioradas.
La idea de la reforma de las reglas es hacerlas ms realistas, efectivas y a medida de cada pas. El espritu con el que las dise la Comisin Europea es prescindir todo lo posible de ajustes iguales para pases diferentes, pero Berln impulso que en esa propuesta inicial se incluyera una reduccin del dficit de al menos el 0,5% anual para los ms endeudados. Francia y Espaa querran borrar eso, pero Alemania querra sumar tambin una reduccin anual de deuda (en el modelo usado hasta ahora se impone una reduccin del 1/20 cada ejercicio). As que la discusin es muy delicada. Parece improbable que no haya objetivos nmeros, pero se buscan frmulas de consenso para cuadrar el crculo: reducir el riesgo sin afecta al crecimiento. Y Espaa confa en que la ayuda de Dinamarca o Pases Bajos, histricamente halcones en esta cuestin, se logre una zona de aterrizaje todava por definir. Para empezar, estos das se multiplicarn los contactos. En Nueva York en el marco de la reunin de la ONU.
A principios de octubre en Madrid, a nivel de los tcnicos que preparan los Eurogrupos. Y, segn explican fuentes de la presidencia, no se descarta tampoco que haya algn Ecofin adicional en las prximas semanas, en persona o videoconferencia, si fuera necesario para apretar el acelerador. El comisario Gentiloni record desde Santiago que su propuesta inicial es perfectamente modificable, pero debe de hacerse respetando el equilibro. “No podemos modificar slo en una direccin una propuesta que necesita mantener juntos tanto el objetivo de estabilidad financiera como el objetivo de promover las inversiones y el crecimiento en un contexto de desaceleracin de la economa”, ha recalcado. “Va a ser un gran desafo, pero la presidencia espaola est comprometida. Quizs lo podamos llamar el Camino Fiscal“, dijo el vicepresidente Valdis Dombrovskis en uno de los muchos juegos de palabras cobre peregrinaje y el Camino de Santiago estos das.
El problema es mantener ese equilibrio si diferentes pases llegan con sus listas de preferencias o exigencias, o si empiezan a meter presin a Calvio, que es la responsable de intentar sacar adelante, pero tambin se juega un puesto muy codiciado y bien remunerado. “No se est planteando nada parecido en ningn encuentro”, descartan desde la presidencia espaola sobre la posibilidad de socios que quieran condicionar su apoyo en el BEI a mejorar en sus aspiraciones fiscales. Pero que est todo abierto slo aade problemas.
En esta competicin no se trata de una cuestin de nombres, pasaportes o partidos polticos. Para la eleccin del BEI cuenta lo que los aspirantes puedan ofrecer de cara al futuro de la institucin. Los cuatro ejes principales son la posicin sobre la financiacin de proyectos verdes, clave para Alemania. La visin nuclear, vital para Francia, que quiere que el BEI ponga mucho dinero para la parte principal de su mix energtico. El tercer elemento es la poltica sobre armas y municiones. El Banco con sede en Luxemburgo no financia nada vinculados a armas, pero hay socios del Este que exigen que eso cambie. Y por ltimo, la cuestin ucraniana. El quinto elemento, el de las reglas fiscales, se quera evitar, pero nadie puede garantizar que no acabe jugando algn papel.