El consejero delegado, Gonzalo Gortzar, lamenta la “discriminacin” y niega beneficios “extraordinarios cados del cielo” en el sector bancario
El reciente pacto de gobierno sellado entre PSOE y Sumar para la investidura de Pedro Snchez no ha dejado de sobrevolar este viernes la rueda de prensa de CaixaBank en Valencia, con motivo de la presentacin de los resultados obtenidos de enero a septiembre de este ao. Estos se resumen en un dato: la entidad gana 3.659 millones de euros, un 48,2% ms que el ao pasado gracias en parte a la escalada de los tipos de inters. Y, sin embargo, a juicio e su consejero delegado, Gonzalo Gortzar, estas cifras estn lejos todava de ser beneficios “extraordinarios”, por lo que ha advertido contra la poltica fiscal del Gobierno en funciones que vuelve a plasmarse en ese acuerdo de investidura.
“Si penalizamos a las grandes empresas nos pegamos un tiro en el pie” como pas, ha dicho tajante. Esta declaracin, que se suma al goteo de crticas de la ltima semana por parte de los agentes econmicos, la haca precisamente Gortzar en respuesta a una pregunta sobre la amenaza de Repsol. El directivo ha evitado pronunciarse directamente sobre el anuncio de la compaa energtica, que ha puesto en duda la continuidad de todos sus proyectos en Espaa por la falta de seguridad jurdica. Pero ha sido claro a la hora de lamentar que la poltica del Ejecutivo de Pedro Snchez tiene a energticas o bancos en el punto de mira.
Y ms ahora que los socios de gobierno han manifestado su intencin de prorrogar los impuestos a las energticas y a la banca que en un principio se vendieron como transitorios. La propia ministra de Hacienda en funciones, Mara Jess Montero, deca esta semana que “no han tenido ningn impacto” en los beneficios de las empresas, mientras que para las arcas pblicas ha supuesto este ao un ingreso de 2.900 millones de euros.
Sin embargo, Gortzar ha vinculado el tamao de las compaas con la productividad: a mayor tamao de la empresa y mayor nmero de trabajadores, mayor es su productividad. “No podemos discriminar en negativo a las grandes empresas por ser grandes, porque habr menos incentivos para que crezcan cuando es la productividad la que har que el pas sea ms rico”. De hecho, el mismo argumento de la productividad le ha servido para cuestionar la medida de la reduccin de la jornada laboral a las 37,5 horas semanales. Si la productividad no se mejora por otra va “y trabajamos menos, ganaremos menos como pas”.
En el caso de la banca, ha vuelto a cargar por “discriminatorio” contra el impuesto, que para CaixaBank ha supuesto 373 millones de euros. Sumados a los 1.635 millones por el impuesto de sociedades y los 85 por el de depsitos, hacen un total de 2.093 millones en impuestos devengados. Es decir, un tipo efectivo “nada menos que del 36%”, superior al 25 que implica el tipo de sociedades, segn ha subrayado en varias ocasiones Gortzar.
En su opinin, “los resultados extraordinarios cados del cielo no se estn produciendo”, ha destacado en referencia a las declaraciones en este sentido de la vicepresidenta segunda del Gobierno en funciones, Yolanda Daz. Y ha vuelto a repetir: “Gravar a la banca ms [que a otros sectores] es pegarse un tiro en el pie porque es el aparato circulatorio de la economa”, esto es, la que financia al resto de empresas. “Si castigamos al aparato circulatorio, castigamos a toda la economa”.
De hecho, las ganancias del banco hasta septiembre las ha enmarcado en un contexto de rentabilidad “moderadamente razonable” que, en el caso de CaixaBank, se traduce en un 11,9%, con lo que sigue siendo inferior al coste de capital y est lejos del 15,2% que se alcanz entre los aos 2007-2009. “Si los beneficios se recortan [con el impuesto], a largo plazo es una mala inversin y provoca salidas de capital. Del sector bancario depende toda la economa, y que atraiga capital de manera eficiente nos permite financiar a la economa de manera eficiente”, ha apuntado. Eso s, a diferencia de Repsol, Gortzar ha querido despejar dudas sobre CaixaBank: “Vamos a seguir comprometidos con Espaa en todo caso y en cualquier escenario”.
El escenario que se prev para 2024 es justamente el de una “desaceleracin econmica”, aunque “el temido aumento de la morosidad no se ha producido todava”. Aun as, las previsiones dibujan pasar de un crecimiento del 2,4% pasamos a uno del 1,4. La buena noticia sigue siendo, segn Gortzar, que las tasas de endeudamiento del sector privado estn en un 50% del PIB en el caso de las familias y en 85% para las empresas, “muy por debajo de lo que estaba hace 15 aos y de los niveles de la Eurozona”. “Las familias tienen ms resiliencia ante una situacin de desaceleracin”, ha sentenciado.