AREQUIPA, Perú.- Autoridades de la Oficina Nacional de Inspección Estatal (ONIE) advirtieron a la población de Matanzas sobre la comercialización de especies de peces tóxicas en la vía pública. La ingestión de estos productos puede causar graves daños a la salud humana, incluida la muerte.
Un reporte del diario oficial Girón recuerda que según las regulaciones vigentes se prohíbe la captura, desembarque y comercialización de especies marinas como el aguají, el cibi, el coronado, la cubera, el jurel gallego, la picúa y la tiñosa, algunas de ellas teniendo en cuenta sus pesos.
“Existen ciudadanos que de forma inescrupulosa sin pensar en el daño que puedan ocasionar se dedican a comercializar especies potencialmente tóxicas, lo mismo en la vía pública que a través de las redes sociales, sin pensar en las consecuencias para la salud de quienes las consumen”, señaló César Reyes Manso, director de la ONIE.
El funcionario también alertó a los matanceros de no comprar o consumir “aquellos peces que no conozcan”.
El reporte indica que lamentablemente no existe fórmula para determinar si la especie es tóxica o no. Incluso, cualquier tipo de pescado en el proceso post mortem tiene una bacteria en su intestino que lo descompone, lo cual demuestra la importancia de conservarlo en hielo a una temperatura entre cero y cinco grados para mantenerlo fresco.
Asimismo, las autoridades matanceras llamaron la atención sobre personas que tienen el pescado todo el día en la mano cogiendo sol. En este proceso el producto se descompone y aunque no sea una especie tóxica puede ocasionar diarrea y vómitos.
“La ONIE acciona contra todos los ciudadanos que detectemos comercializando estas especies y las multas dependen de si son reincidentes o si cometieron la infracción dentro del mismo año”, destacó Reyes Manso.
En el caso de las embarcaciones que se detecten con una violación, agregó el directivo, en dependencia de la contravención pueden estar sin pescar hasta dos años, se les puede retirar la licencia de pesca o en caso de que fuera grave pudieran ser procesados por los tribunales.
La nota de Girón previno particularmente sobre la venta de especies tóxicas en el puente de Versalles, donde las autoridades han detectado violaciones.
La advertencia de la ONEI se inserta en un contexto de escasez de alimentos, hambre y crisis en la Isla, circunstancias que pueden alentar a los cubanos a procurar alimentos de fuentes inseguras y arriesgar su salud.